Austria,  Cultura,  Viajes

¿Qué hacer en Salzburgo en dos días?

Comenzamos con una curiosidad: Salzburgo es la ciudad de la sal (Salz = sal, burgo = ciudad). Y es que las minas de sal han sido lo más conocido de la ciudad durante toda la Edad Media hasta el nacimiento de Mozart, figura hoy día omnipresente en toda la ciudad.

Salzburgo es una ciudad pequeña, de apenas 150.000 habitantes y que se localiza en Austria, pero casi en la frontera con Alemania. A pie te recorres la ciudad en unos 30 minutos, por lo que no necesitas de un hotel en el centro para visitar la ciudad.

El entorno de Salzburgo está rodeado de montañas

Si el tiempo acompaña, dos días dan más que de sobra para recorrer lo básico. Lo del tiempo acompaña es importante, porque al estar muy cerca de los Alpes el tiempo puede cambiar muy rápidamente, tanto a bien como para mal. Recomendamos consultar la previsión de forma regular a fin de evitar sorpresas. En nuestra visita de dos días, el segundo día fue para mal.

Un paseo por la ciudad

El casco antiguo de Salzburgo es encantador. Se trata de un pequeño y cuidado centro histórico, de pequeñas callejuelas y callejones y que todavía no ha sido abandonado al turismo de masas. Sin lugar a dudas el centro histórico está muy bien conservado, entre otras cosas porque los letreros luminosos de los comercios están prohibidos, manteniendo por tanto una estética tradicional.

Getreidagasse es la calle más comercial del centro de Salzburgo

Llama la atención la omnipresente figura de Mozart a lo largo de todo el centro histórico, presente en todos los escaparates de pastelerías donde venden los famosos bombones de Mozart. Un consejo: los bombones también se pueden encontrar en los supermercados a bastante menos precio que en las tiendas para turistas.

Los escaparates de las pastelerías de Salzburgo son parada obligatoria

En paralelo al centro histórico se encuentra el río Salzach, que también toma su nombre de las minas de sal. El paseo del río es muy agradable, ya que desde él se visualiza el casco histórico de la ciudad, y por encima de ella la fortaleza. Este río es cruzado por no pocos puentes, destacando entre todos ellos el puente de los candados, donde los enamorados colocan candados en señal de amor eterno.

Puente de los candados de Salzburgo

Kapitelplatz

Al final del centro encontramos Kapitelplatz, justo al lado de la catedral y el palacio del obispo. Desde aqui se puede subir a la fortaleza que hay en lo alto de la montaña, y que vigila la ciudad desde las alturas. Desde aqui podemos comenzar la subida a pie a la fortaleza, o tomar el funicular.

Aparte de las vistas, sin duda lo más llamativo de Kapitelplatz es una enorme estatua de un pastor sobre una esfera dorada. Se trata de la Sphaera, interesante estatua de contrastes de la que no hemos encontrado ningún texto que explique su significado. ¿Está ahí sólo por que es bonita?

Sphaera, muy bonita, pero ¿qué quiere decir?

En los aledaños de Kapitelplat, justo donde empieza la falda de la montaña, podemos encontrar una rueda de madera que gira con la fuerza del agua. Esta rueda de madera se utilizaba antiguamente como molino de trigo. No en vano, junto a esta noria se encuentra la panadería más antigua de Salzburgo, que se puede visitar y dónde también se puede comprar pan.

La fortaleza de Hohensalzburg

La fortaleza de Salzburgo domina desde las alturas toda la ciudad. Es posible visualizarla desde kilómetros y desde muchos lugares del centro histórico. Es sin duda lo que más llama la atención de la ciudad la primera vez que la vemos.

Esta fortaleza data del año 1077 con el objetivo de defender la ciudad. Tras numerosas ampliaciones toma su aspecto actual aproximadamente en el año 1500. Nunca fue conquistada, y permaneció activa como edificio militar hasta los años 60 aproximadamente.

Vistas de la ciudad desde la fortaleza de Salzburgo

Hoy día la fortaleza, aparte de tener las mejores vistas de la ciudad, es un museo de la propia fortaleza, un museo militar y un museo de marionetas. Da la impresión que no sabían que hacer con el edificio. ¿Es recomendable su visita? En nuestra opinión es bastante prescindible y sólo merece la pena por las vistas, pero es perfecto para visitar en un día de lluvia.

Vista desde la fortaleza

Para subir a la catedral se puede subir en funicular por unos 4€ más aparte del precio de la entrada. También se puede subir a pie, siendo ésta nuestra opción preferida. En los entornos de la fortaleza, camino del museo de arte moderno, hay un parque muy bonito para pasear y desde el cual también se visualiza toda la ciudad.

Palacio de Mirabell

El palacio de Mirabell está rodeado de unos bonitos jardines y que son sin duda una de las cosas a visitar más importantes de la ciudad. Son muy pequeños y se visitan en 20 minutos. Mejor visitarlos en primavera y verano.

Resumen

Salzburgo es una ciudad agradable para visitar y pasear sin estresarse. Aparte de lo que hemos comentado en este artículo, hay muchas más cosas a visitar: el interior de la catedral, la casa donde nació Mozart, la casa donde vivió Mozart (sí, no son las mismas), el cementerio de San Pedro, las catacumbas, el museo de arte moderno, etc. Nosotros por el contrario hemos preferido hacer una visita tranquila, sin ningún tipo de presión para así disfrutar de la ciudad.