Semana santa española
Antes de conocer la semana santa española, no tenía idea a qué se referían cuando hablaban de “pasos”, nazarenos, costaleros, cofradías o hermandades; mi primer acercamiento a esta tradición fue hace unos años en Salamanca, y sinceramente sentí que estaba dentro de una película: procesiones de personas vestidas con atuendos que me recordaban al Ku Kux Klan (capirote y cara cubierta), muchos de ellos descalzos, alumbrados con las luces de las velas que ellos llevaban, cargando cruces y todo tras el humo de la incineración del incienso.
Este año hemos visto la semana santa en Sevilla, ciudad donde esta tradición se mantiene más fuerte.
Sevilla tiene más de 60 hermandades, cada una de ellas sale a una hora y un día determinados con un recorrido específico, pero todas tienen que hacer un trayecto obligatorio, la Carrera oficial, que va desde Campana hasta la catedral, pasando por la calle Sierpes y por la avenida de la Constitución.
Mi percepción es que a diferencia de lo que vi en Salamanca, en Sevilla se ha transformado en un evento turístico; tanto es así, que no es fácil ver la procesión, además de tener que “compartir balcón” con personas escuchando música, gritando, etc, por lo que la sensación de fiesta religiosa la tuve más en Salamanca que en Sevilla.
Me llamó la atención:
Los niños que van de monaguillo reparten caramelos a otros niños.
Los niños van recolectando cera que piden a los nazarenos, y con eso hacen bolas de cera.
He leído que la razón de que los nazarenos vistan capirote se debe a que era la vestimenta de penitencia que llevaban los condenados por el tribunal de la inquisición: les hacían colocar el capirote y recorrer las calles de la ciudad, para que todos fueran testigos del castigo.
Hasta hace un tiempo, los costaleros (personas que cargan los pasos) cobraban por su trabajo; actualmente lo hacen los hermanos de las cofradías de forma gratuita, y al parecer, hay lista de espera para formar parte de ese grupo.
Algunos recorridos de las cofradías pueden llegar a durar 20 horas.
La madrugá en Sevilla es la noche que va del jueves al viernes santo, donde podemos ver las procesiones del Gran Poder, el Silencio, la Macarena, el Calvario, la Esperanza de Triana y los Gitanos.
La saeta es un canto religioso tradicional que se realiza ante el paso de las procesiones.
¡Hasta pronto!